No llegamos ni a soñarlo y en menos de un año ya teníamos 10 franquicias
Todo comenzó de chica, en mi lugar, LA PLAYA de Necochea, jugando a inventar, crear, recolectando caracoles, piedras, madera... y todo lo que traía el MAR, quería juntar todo y hacer algo diferente. También jugaba a curar, a ser veterinaria, como mi papá, buscaba gaviotas, palomas, perros, gatos y todo lo que camine, que necesitara de mi ayuda. Los llevaba a mi casa, los cuidábamos y los devolvíamos a su ambiente. Así empezó todo, una búsqueda constante de crear algo distinto con la naturaleza y el amor por los animales. Al terminar la secundaria llegó el momento de decidir qué estudiar... ¿Diseño o Animales? quería ambas, pero todo no se podía. Así que me deje llevar por una ciudad: Mar del Plata y sus olas. Para una amante del mar no fue tan difícil la decisión, así comenzó mi carrera de Diseño Industrial. En ese momento de mi historia, sin pensarlo y cuando menos lo esperé, apareció Guido, mi compañero de vida. Una persona con la que tenemos los mismos intereses, gu